En Florencio Varela se dio un hecho hace 5 años que tuvo repercusiones fatales al día de hoy: Paula Martinez, de entonces 18 años, fue al cumpleaños de su amiga en frente de su casa. Luego de eso, denunció que en esa misma fiesta la drogaron, secuestraron y violaron en grupo, también fue trasladada contra su voluntad hacia otra dirección donde el abuso continuó. Cinco de los imputados fueron finalmente detenidos, uno es un Guardia Comunal de la localidad y otro hoy está prófugo.

Sin que la desgracia quede ahí, desde los primeros días no paró de recibir hostigamientos, amenazas e increpaciones, razón por la cual tuvo que sumar más de treinta denuncias relacionadas a los tratos vecinales que recibía.

El 6 de marzo del 2020, la víctima denunció que fue atacada por familiares de los imputados que la golpearon de manera salvaje. “Necesito ayuda por favor, me agarraron entre 10 mujeres parientes de unos de los imputados y me molieron a palos y me mandaron al cuerpo médico’’, relató la joven y continuó “estoy necesitando ayuda porque me están amenazando de muerte de todos lados, temo por la vida de mis hijos y demás familiares”.

Su juicio está programado para marzo 2022, al cual se adiciona una investigación plagada de inconsistencias: cuando Paula quiso quitarse la vida en 2019, su madre denunció que no le hicieron el protocolo de violación correspondiente, la llevaron a una comisaría que no era la indicada, no la hisoparon ni examinaron cuando dijo que la drogaron.

Después de identificar a los que la atacaron, tuvo que convivir durante un año con los violadores a 80 metros de su casa. Al momento de denunciar los hechos, y sin una orden o notificación que así lo requiera, los cinco abusadores entraron a la comisaría como si hubiesen sido avisados.

Hace solo unas horas, Paula se colgó del ventilador de su casa con una cadena. La encontró su tío, ya sin vida. Se espera que el juicio continúe, pese al trágico final que tuvo la víctima.