El 18 de septiembre se presentaron ante la Oficina Anticorrupción declaraciones juradas que fueron públicas dos días después. Algunos políticos, entre ellos Cristina Fernández, Diego Santilli y Máximo Kirchner, hicieron visibles sus patrimonios. Se registraron muchos aumentos, principalmente debido a la nueva tasación de sus activos.
La vicepresidente declaró una fortuna de más de 16 millones de pesos, especificando que en su mayoría se constituyen como herencia de Néstor Kirchner. Es prudente destacar un aumento del 40% de la cifra declarada el año pasado, que superaba los 9 millones.
Por su parte, Santilli declaró una fortuna de 18 millones, alegando que un 50% pertenece a un negocio inmobiliario, considerando un sueldo de ex vicejefe de Gobierno, y el patrimonio de su esposa.
Sin embargo, la atención se la llevó quien lidera el ranking. El hijo del matrimonio Kirchner, fundador y líder de La Cámpora, y jefe del bloque de Frente de Todos en la Cámara de Diputados, declaró una fortuna de más de 400 millones de pesos en el año 2020, superando por amplia diferencia los montos afirmados por los demás dirigentes.
Es curioso resaltar algunas particularidades, como el hecho de que su fortuna aumentó en 1/3 desde 2019, a pesar de que a principios de la pandemia alegó la necesidad de un impuesto a quienes poseen grandes fortunas para constituir un fondo con el cual gestionar la emergencia sanitaria.
Es necesario sumarle a ese monto 27 propiedades heredadas de su padre, y otro aporte de más de 12 millones de su madre, quien realizó una sucesión de sus bienes para evitar embargos de la justicia. Además, declaró tener acciones en sociedades familiares.
¿Qué opinás de la realidad económica de nuestros políticos? ¿Creés que esas cifras son reales?