Villa Elisa, Paraguay, fue el escenario de un hecho horrorizante cuando por la tarde de ayer un hombre de 35 años de edad se estaba por retirar de un supermercado y le indicaron que se coloque el barbijo correctamente.
El señor, que para ese momento tenía su tapaboca en el mentón, se sintió ofendido por el pedido y comenzó una acalorada discusión con el personal de seguridad, que le pidió que se retirara del establecimiento comercial.
Furioso, se dirigió a su vehículo y al irse tomó su revólver y comenzó a balear al aire como protesta por el llamado de atención. Nadie resultó herido ni del personal de seguridad, ni de los consumidores. Fue detenido posteriormente y alegó que su reacción fue causada por <<nervios>>.

En este momento está a disposición del Ministerio Público (la fiscalía general del país, o lo que sería la procuración general en Argentina). Un hecho donde la agresión es ilegítima y no parece haber respondido a ninguna ofensiva de ningún tipo hacia su persona.

Como apreciación personal hacia el lector, se respeta que todos tenemos el derecho natural a poseer y usar armas, pero es importantísimo que desde la propia voluntad individual se extremen tanto las medidas de seguridad como el entrenamiento mental y la responsabilidad de nuestras libertades. Concienticemos sobre la disciplina que requiere ser un usuario responsable, la mejor regulación es la propia.