El director del Banco Nación Argentina y presidente del partido Unidad Popular, Claudio Lozano, afirmó en diálogo con el medio BAE Negocios que «hay que dejar de pagarle al FMI para no rifar las reservas que quedan».
El funcionario se mostró muy crítico respecto al manejo de la negociación con el organismo de crédito internacional por parte del ministro de Economía, Martín Guzmán. Para Lozano «deberían suspenderse todos los pagos al organismo», incluso instó a recurrir a los tribunales internacionales para «denunciar como nulo el crédito stand by».
«Estamos en una coyuntura que evidencia el fracaso de una negociación que se montó sobre la idea de que era factible armonizar un esquema de acuerdo benévolo con el Fondo, donde el organismo aparecía como un aliado de la Argentina para resolver sus problemas económicos. Este planteo, de un Fondo aliado, hizo que en el período que va de octubre de 2020 hacia el cierre del año pasado, el ajuste fiscal fuera notorio, aún sin acuerdo«, resaltó el titular del BNA.
«Claramente la negociación fracasó«, sostuvo. Tras esta declaración, cuestionó que se le hayan pagado cerca de 6.500 millones de dólares al Fondo, durante el transcurso de la infructuosa negociación.

«Llegamos a una situación en la que el FMI mantiene su oferta de siempre y que no ha garantizado ni más plazo, ni mejor tasa, ni ha eliminado los sobre cargos. Tampoco se hizo cargo de su responsabilidad (por el préstamo otorgado durante la gestión Macri) y sigue apretando en materia fiscal», comentó.
Respecto a llevar el acuerdo por vías judiciales, el presidente de Unidad Popular amplió su punto de vista: «Este acuerdo tendría que haber sido declarado nulo. Incluso aparecieron estudios internacionales donde se plantea la nulidad jurídica. El caso se debería haber llevado a los estrados internacionales, o al seno de la ONU«, precisó.
La situación del país es particularmente compleja en materia de vencimientos. Sólo para la semana que viene, Argentina debe pagar 715 millones de dólares como parte del vencimiento del mes de enero. Posteriormente, deberá pagar 380 millones de dólares en febrero y en marzo otros 290 millones.
«Vamos a una coyuntura donde la negociación debería encararse desde dos bases: hay que dejar de pagarle al Fondo para no rifar las reservas que quedan. Y, en segundo lugar, avanzar con los planteos en el campo regional e internacional, para mejorar los términos de la discusión«, concluyó Lozano.