El régimen de Nicolás Maduro implementará un semáforo sanitario que tendrá su vigencia a partir de noviembre. Esta medida tuvo una prueba piloto que se llevó a cabo entre el 11 y el 17 de octubre en restaurantes de todo el país.
El sistema propondrá una inscripción obligatoria al Sistema Patria, en donde se almacenan los datos de todos los habitantes y según su situación sanitaria se les restringirá el acceso a lugares públicos.
Cuando se quiera acceder a un bar o restaurante, se tendrá que presentar un código que indica la situación sanitaria de cada individuo. El color verde indica que la persona fue vacunada en supuesta prevención del CoVid-19; el color amarillo muestra que la persona no fue vacunada pero no registra como portador del virus y el color rojo, quienes hayan sido registrados como infectados en los últimos 20 días.
¿Qué pasa si el semaforo está en amarillo y la persona informa que fue vacunada?
Para ingresar al local, los usuarios deberán mostrar su carnet de vacunación.
Las principales críticas a esta medida radican en que una gran cantidad de personas no se encuentran inscritos en el Sistema Patria; por lo que es posible que sus datos no aparezcan en la aplicación del semáforo al momento de ingresar a un local, y por lo tanto están obligados a dárselos al régimen.
El registro, de proveerse a todos los ciudadanos, no prueba ser eficaz porque quienes hayan tenido el virus pudieron no haberse testeado y por lo tanto no aparecer como infectados. Y si están vacunados pero con el virus, entonces pueden seguir contagiando.
Todo esto sumado a los hechos de que menos del 10% de la población puede acceder a las pruebas de PCR cuyos datos maneja el gobierno, y menos del 6% puede acceder a restaurantes y aun si están vacunados, nada garantiza su eficacia o mitigación del virus entre los habitantes.
